Mar tranquilo, olas de medio metro
55 nudos
![]() | Una vez existió un niño que dijo a sus amigos: "A mí me gustaría ser para vosotros un faro. Ya sabéis, una pequeña lucecita, muy pequeña, que siempre os muestre el camino. Pueden caer las fuertes lluvias, las olas pasarle por encima, pero vuestra lucecita siempre os guiará en la tempestad, para cuando queráis mirarla". Sus amigos sonrieron y le miraron condescendencia, sabiendo que nunca necesitarían mirar a una luz como aquella. El niño no se dio cuenta de que él mismo también era barco y que, bajo sus pies, no se encontraba la roca, sino el mismo mar. |