Día: 11 de febrero
Potencia y dirección del viento: reduciéndose
Dirección: hacia el sur-suroeste
Mar tranquilo, olas de medio metro
45 nudos
Foto de la corsaria pirateada al Capitán del Herrera [+]
Últimamente llegan a nuestro barco algunas comunicaciones sobre el barco corsario Azulia. Por lo visto una terrible tempestad ha dejado maltrecho su aparejo y un iceberg ha rozado su casco. Se encuentra, controlando a penas su dirección, perdido por mares de influencia portuguesa.
Todos nos hemos encontrado alguna vez con icebergs en el camino. Científicamente dicen que, en total, poseen más calor que una cerilla, pero, al estar tan distribuido, son terriblemente fríos. En la superficie pueden resultar controlables e, incluso, en la II Guerra Mundial alguno de los contendientes se planteo construir cargueros con ellos, es verdad.
Pero, como digo, son terriblemente fríos y peligrosos. Por debajo del mar, la parte que uno no ve, siempre ocultan peligros contra los que uno puede arañar el casco. A veces vistos de frente, parecen pequeños, pero al rodearlos vemos que son alargados. En otras ocasiones, aparecen cubiertos de adherencias y nos parecen, a lo lejos, otros barcos. Gracias a Dios que, cuando se tienen poderosos aliados en el mar, se les puede advertir con suficiente antelación.
Sin duda el mejor truco con los icebergs es evitarlos. Es una pena que la capitana del Azulia no haya tenido tiempo para maniobrar. A pesar de ser una corsaria de nuestro archipiélago, siempre me ha gustado su forma de navegar, siempre tan distinta. Solemos coincidir por Curaloña, resulta con ella fácil de establecer contacto. Cuando uno la ve ceñir parece sencillo elegir un rumbo y mantenerlo sin que nada nos altere, aunque ésto a veces le obligue a hacer maniobras algo complicadas.
Ojalá pueda reparar sus destrozos pronto y recuperar ese estilo tan distintivo.